Una crisis puede llegar a estallar por diferentes factores, entre ellos tensiones no resueltas en referencia al agua o la tierra, reclamos relacionados con la marginalización política o socioeconómica, cuestiones relacionadas al cambio climático o el reclutamiento de parte de grupos armados violentos. De no ser abordados, estos factores pueden ejercer presión sobre las poblaciones para la transición que están intentando hacia una recuperación sustentable y hacia soluciones duraderas al desplazamiento.

Junto a las necesidades de recuperación – tales como la restauración de los medios de subsistencia, acceso a vivienda u otros servicios – las dimensiones sociales que mantienen a las poblaciones desplazadas en situaciones de vulnerabilidad también deben ser resueltas.

En situaciones de fragilidad en donde hay un riesgo de deterioro hacia una crisis humanitaria o DE desplazamiento y en otras en las que las comunidades se están recuperando de las crisis, la OIM invierte en las comunidades afectadas y en sus líderes para empoderar a la sociedad civil y prevenir futuras crisis además de mejorar el aspecto de los derechos humanos.

Nexo Acción Humanitaria- Desarrollo- Paz 

La Organización está presente en países antes, durante y luego de las crisis, y afianza sus capacidades en los diferentes sectores para el desarrollo de asociaciones y para implementar respuestas efectivas a lo largo del Nexo Acción Humanitaria- Desarrollo- Paz (HDPN).

La asistencia humanitaria de la OIM asegura que se cubran las necesidades inmediatas de las poblaciones afectadas, en tanto que su transición, la consolidación de la paz y la programación orientada al desarrollo ayuda al desarrollo de la resiliencia y la independencia; que se restauren la paz y la seguridad; y que se mejore el bienestar de las personas desplazadas y de las comunidades de acogida.

Antes de una crisis, la advertencia temprana y las acciones de preparación conducen a una respuesta y a una recuperación mucho más efectivas. La OIM comienza a planificar con mucha anticipación para lograr una resiliencia, transición y recuperación a largo plazo. La Organización trabaja dentro de los Equipos de País de Naciones Unidas, junto a los gobiernos, para brindar apoyo a los marcos y para el fortalecimiento institucional. La OIM también trabaja con las comunidades y las autoridades locales en el desarrollo de la resiliencia, para la reducción de los riesgos y para preparar respuestas efectivas ante futuras crisis.

Durante una crisis, las actividades de protección y asistencia humanitaria de la OIM aspiran a brindar apoyo a los dividendos a largo plazo y a influenciar de manera positiva la capacidad de las comunidades afectadas para el desarrollo de la independencia y la recuperación tras una crisis.

En campamentos o entornos similares, la Organización asegura que las estructuras de gobernanza interna estén en el lugar correspondiente para facilitar los procesos informados de toma de decisiones y asegurar que las personas desplazadas participen activamente en la identificación de las soluciones a su desplazamiento. De igual manera, las actividades en el segmento de los albergues parten de la base de prácticas inteligentes de construcción que tienen en cuenta el clima local y los materiales y brindan soluciones sobre albergues que las comunidades pueden apropiarse y liderar a través de su proceso de recuperación. La OIM también brinda asistencia en dinero en efectivo a través de varios sectores, una modalidad que ayuda a las poblaciones a atender sus necesidades y prioridades.

Siguiendo los lineamientos del enfoque de la Resolución Progresiva de las Situaciones de Desplazamiento de la OIM, los esfuerzos de la Organización en pos de encontrar soluciones duraderas involucran iniciativas adoptadas a nivel individual, comunitario y estructural.

Enfoques de Base Comunitaria

Las comunidades se encuentran en la primera línea de las crisis en todo el mundo, ya sea que acojan a poblaciones desplazadas, reciban a poblaciones de retornados o experimenten situaciones de desplazamiento.

Cuanto más resiliente es la comunidad, más podrá soportar los impactos de una crisis o vencer los desafíos asociados con la repentina llegada o partida de las poblaciones.

Es probable que los enfoques de base comunitaria bien diseñados tengan más éxito respecto de la contribución que pueden hacer al bienestar de las comunidades y para impulsar soluciones sustentables que conduzcan a la recuperación y al desarrollo.

Los puntos de acceso de la OIM para estas inversiones ocurren antes de una crisis, durante las respuestas humanitarias y a lo largo de las fases de recuperación y de desarrollo. La Organización utiliza métodos participativos en todo su trabajo para que las poblaciones sean empoderadas en las decisiones que afectan sus vidas.