La Conferencia Internacional del Trabajo da el primer paso hacia una regulación internacional pionera sobre los peligros biológicos

GINEBRA (Noticias de la OIT) – Los delegados que asistieron a la 112ª Conferencia Internacional del Trabajo (CIT) dieron el paso inicial hacia lo que sería la primera norma internacional que gobierne los peligros biológicos en el ámbito laboral.

Actualmente, no existe una regulación internacional enfocada en los peligros biológicos en el entorno de trabajo. Las consultas continuarán en la CIT del próximo año, durante la segunda sesión del Comisión Normativa sore los sobre Peligros Biológicos. Las discusiones podrían resultar en una nueva Convención y/o Recomendación, que sería la primera norma laboral internacional adoptada desde que el acceso a un entorno de trabajo seguro y saludable fue elevado a un Principio y Derecho Fundamental en el Trabajo.

En la ceremonia de clausura, el Director general de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Gilbert F. Houngbo, elogió los debates “intensos, productivos y ricos” que sustentaron las discusiones de la CIT.

“Enfrentamos inseguridad e inequidad persistentes, así como informalidad en el mundo,” dijo a los delegados, añadiendo que las discusiones habían “confirmado un aspecto crítico: Debemos actuar; no hacerlo no es una opción.”

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“Han respondido a mi llamado… para hacer del progreso de la justicia social la base para una paz sostenible, una prosperidad compartida, la igualdad de oportunidades y una transición justa,” dijo.

La CIT aprobó además una resolución presentada por la Comisión de la Discusión General sobre el Trabajo Decente y la Economía del Cuidado. La resolución incluye una solicitud para que el director general prepare un plan de acción sobre trabajo decente y la economía del cuidado para apoyar las conclusiones del Comité, y para tener en cuenta esas conclusiones en futuras propuestas de programa y presupuesto de la OIT.

Las conclusiones proporcionan un entendimiento común sobre la economía del cuidado, sus principios rectores y los actores. Las mismas afirman que el trabajo en la economía del cuidado no es una mercancía y que todos los trabajadores del cuidado deben disfrutar de un trabajo decente. También declaran que una economía del cuidado que funciona bien y es robusta juega un papel crítico en la construcción de resiliencia ante crisis, así como en el desarrollo social y económico. Las conclusiones también ofrecen recomendaciones de orientación política y reafirman el papel de liderazgo global de la OIT en el avance del trabajo decente en el sector a nivel global, regional y nacional.

La Conferencia también adoptó las conclusiones de la Comisión de la Discusión Recurrente sobre Principios y Derechos Fundamentales en el Trabajo. Las conclusiones subrayan que estos principios y derechos fundamentales son más necesarios y relevantes que nunca. Las mismas proporcionan orientación para que la OIT y sus constituyentes respeten, promuevan y realicen efectivamente estos principios y derechos en una era de cambios rápidos en el mundo del trabajo, incluyendo las transiciones demográficas, ambientales y digitales. Las conclusiones la comisión identifican cuatro áreas de enfoque para la acción política: fortalecer la gobernanza de los mercados laborales; libertad de asociación y diálogo social, incluyendo la negociación colectiva; formalización y empresas sostenibles; e igualdad e inclusión.

La conferencia también aprobó el informe de la Comisión de Aplicación de Normas, que examinó la aplicación de varios Convenios de la OIT en 24 casos de países individuales. La comisión celebró una sesión especial sobre Bielorrusia, con el objetivo de asegurar el cumplimiento de las recomendaciones de la Comisión de Investigación, establecida en 2003, para examinar la observancia por parte del Gobierno de Bielorrusia de los Convenios Nos. 87 y 98 de la OIT.

La comisión también discutió el Estudio General titulado “La administración del trabajo en un mundo del trabajo en transformación”. Los miembros subrayaron la oportunidad del estudio general, dada la rapidez y los cambios fundamentales y las crisis que enfrenta el mundo del trabajo. Reafirmaron el papel vital de las administraciones laborales efectivas en lograr un trabajo decente, asegurando la promoción y respeto de los principios y derechos fundamentales en el trabajo, y creando un entorno propicio para empresas sostenibles.

La CIT también incluyó una Sesión Especial sobre la situación de los trabajadores de los territorios árabes ocupados. El director general, presentando su informe a los delegados, describió la situación en Gaza como “catastrófica”, añadiendo que “los derechos laborales habían sido diezmados”. Subrayó la necesidad de prepararse para una recuperación rica en empleo, anclada en un compromiso para proporcionar trabajo decente.

Una reunión subsecuente de los socios para el desarrollo de la OIT prometió apoyo financiero y de otro tipo para la respuesta de la OIT a la crisis. Este plan se basa en tres pilares: alivio inmediato, evaluación del impacto del mercado laboral de la guerra, y recuperación temprana. Incluyendo los millones en nuevos compromisos asegurados en la reunión de socios para el desarrollo, los países donantes se comprometieron a proporcionar aproximadamente US$10 millones para apoyar el programa de asistencia de la OIT para el territorio palestino ocupado. El programa incluye la promoción del empleo, la protección social y el apoyo empresarial.

Además, el Foro Inaugural de la Coalición Global para la Justicia Social tuvo lugar durante la CIT. El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, quien es el copresidente de la coalición, y el presidente de Nepal Ramchandra Paudel, se dirigieron al Foro, al que asistieron más de 40 ministros de gobierno. El programa del Foro incluyó tres diálogos de alto nivel (sobre la construcción de la resiliencia de las sociedades; mejorar la coherencia entre las políticas económicas y sociales; y fomentar el diálogo social para la prosperidad compartida) y una discusión especial con los ministros de trabajo de los actuales presidentes del G7 y G20, la cual se centró en cómo estos cuerpos multilaterales pueden avanzar la justicia social.

“Las fructíferas discusiones que tuvimos ahora deben traducirse en acción concreta para desarrollar las áreas temáticas de la Coalición a través de esfuerzos individuales y colectivos,” explicó Houngbo.

La Coalición, lanzada en 2023, ya ha atraído a más de 290 miembros, todos comprometidos en promover una mayor justicia social. Los miembros incluyen gobiernos, organizaciones de trabajadores y empleadores, organizaciones de las Naciones Unidas y regionales, instituciones financieras regionales, instituciones académicas, ONG internacionales y empresas.

La 112ª CIT se celebró en Ginebra del 3 al 14 de junio de 2024. Asistieron más de 4,900 delegados, representando a gobiernos, organizaciones de empleadores y trabajadores. La 113ª CIT se celebrará en junio de 2025. La CIT es la reunión anual de los 187 Estados Miembros de la OIT, la agencia especializada de las Naciones Unidas para el mundo del trabajo.

Puede acceder a las fotos de la CIT en línea, incluida la ceremonia de clausura.